Thursday, October 16, 2008

Filmación de una extraña figura en un cementerio causa conmoción en un pueblo del sur de Córdoba - Argentina

Fuente: El Eco Digital - 26 Noticias
CORDOBA. 15.10- Una extraña figura humana que pudo ser captada durante una filmación para la televisión realizada en un cementerio causó conmoción en la población cordobesa de Huinca Renancó, en el extremo sur de la provincia, donde gran cantidad de vecinos comenzaron a hablar de un supuesto "fantasma".

La filmación, en la que muchos creen ven el paso de un fantasma, se produjo el jueves pasado cuando un camarógrafo de HR Noticias, el noticiero del canal local Huinca Cable, realizaba una toma para una publicidad, en el frente del cementerio cooperativo. Cuando las imágenes fueron editadas pudo observarse tras el techo a dos aguas de una edificación del cementerio, el paso de lo que parecía ser un hombre vestido de negro.
"No pensamos en nada esotérico, ni nada parecido, pero cuando las imágenes subieron a Internet, hay gente acá que empezó a tener miedo, sobre todo jóvenes", indicó hoy Ignacio Castro, de la producción del noticiero. Según explicó, los responsables del cementerio aseguraron que ningún trabajador del predio a esa hora, pasado el mediodía, se encontraba en ese sector.
Castro admitió, en diálogo con Noticias Argentinas, que puede haber sido "una broma muy bien armada, pero nos llama la atención que una persona pase por ahí justo en ese momento, ya que el camarógrafo no hizo ningún montaje previo, más que poner el trípode y tomar las imágenes". Según explicó, en los días posteriores se hicieron pruebas con una persona pasando por el tapial posterior al techo, para comprobar que es posible caminar por el lugar, aunque también llama la atención la facilidad con la que lo hace la figura de la filmación.
"Camina como si fuera el patio de su casa y en realidad se trata de un tapial muy angosto. El tamaño es de lo que parece ser un hombre bastante alto y el rostro no se le puede distinguir, puede ser porque lleve una capucha o esté enmascarado", describió el periodista.
Como parte del trabajo de difusión, el noticiero hizo algunos sondeos entre la gente que lleva varios años en el barrio Alborada, aledaño al cementerio, los que se mostraron escépticos en cuanto a alguna presencia sobrenatural en el lugar y juran que en los veinte años que lleva el cementerio instalado, jamás vieron "nada raro".
Sin embargo, entre los más jóvenes, el caso causó conmoción, y algunos empezaron a tejer toda clase de historias y conjeturas.

Thursday, October 09, 2008

El enigma de la Virgen de Guadalupe

Los ojos de Guadalupe constituyen uno de los grandes enigmas para la ciencia en estos momentos, como han constatado los estudios del ingeniero José Aste Tönsmann del Centro de Estudios Guadalupanos de México.

Este graduado en ingeniería en sistemas ambientales por la Universidad de Cornell ha estudiado durante más de veinte años la imagen impresa de la Virgen en ese tosco tejido hecho con fibras de maguey de Juan Diego, el indígena que recibió las apariciones que cambiarían decisivamente la historia de México.
Trece personajes en los ojos de la Virgen

Si bien sus dimensiones son microscópicas, el iris y las pupilas de los ojos de la imagen tienen impresa al menos la imagen sumamente detallada de trece personajes. Las mismas personas están presentes tanto en el ojo izquierdo como en el derecho, con diferentes proporciones, al igual que sucede en los ojos de un ser humano que refleja los objetos que tiene en frente.

El reflejo transmitido por los ojos de la Virgen de Guadalupe es la escena en la que Juan Diego mostraba al obispo fray Juan de Zumárraga y a los presentes en la estancia el manto con la misteriosa imagen. Era el 9 de diciembre de 1931.
Un estudio digital

La técnica que ha utilizado para su estudio el ingeniero Aste Tönsmann es la del proceso digital de imágenes usado por los satélites y por las sondas espaciales para transmitir informaciones visivas. El científico, de hecho, ha trabajado durante años en IBM en procesamiento digital de imágenes.
No es pintura

Según las conclusiones del estudio, reveladas por Aste Tönsmann a Zenit, durante una visita que realizó a Roma a inicios de enero, nos encontramos ante una imagen «que no ha sido pintada con mano de hombre».
Se conserva inexplicablemente

Ya en el siglo XVIII varios científicos realizaron pruebas científicas que mostraban cómo era imposible pintar una imagen así en un tejido de esa textura. De hecho, con el pasar del tiempo, las fibras del «ayate» que utilizaban los indios se degradan. Normalmente no deberían durar más de veinte años. Sin embargo, la imagen está impresa desde hace 470 años.
Sin colorantes naturales

Richard Kuhn premio Nobel de Química, recordó Aste Tönsmann, hizo análisis químicos en los que se pudo constatar que la imagen no tiene colorantes naturales, ni animales ni mucho menos minerales. Dado que en aquella época no existían los colorantes sintéticos, la imagen, desde este punto de vista, es inexplicable.
Numerosas preguntas sin respuesta

En 1979 los estadounidenses Philip Callahan y Jody B. Smith estudiaron la imagen con rayos infrarrojos y descubrieron con sorpresa que no había huella de pintura y que el tejido no había sido tratado con ningún tipo de técnica.

Aste Tönsmann, se pregunta, «¿Cómo es posible explicar esta imagen y su consistencia en el tiempo sin colores y con un tejido que no ha sido tratado? Es más, ¿cómo es posible que, a pesar de que no haya pintura, los colores mantengan su luminosidad y brillantez?».
Iridescencia

El ingeniero peruano explica que «Cahallan y Smith han mostrado cómo la imagen cambia ligeramente de color según el ángulo de visión, un fenómeno que se conoce con el término de iridescencia, una técnica que no se puede reproducir con manos humanas».
Como hubiera sucedido en cualquier persona

El investigador comenzó a desarrollar su estudio en 1979. Agrandó los iris de los ojos de la Virgen hasta alcanzar una escala 2.500 veces superior al tamaño real y, a través de procedimientos matemáticos y ópticos, logró identificar todos los personajes impresos en los ojos de la Virgen.

En los ojos de la Virgen –revela– se encuentran reflejados los testigos del milagro guadalupano, el momento la que Juan Diego mostraba el ayate al obispo. Los ojos de la Virgen tienen así el reflejo que hubiera quedado impreso en los ojos de cualquier persona en esa posición.
Los diversos personajes

Se puede individuar un indio sentado, que mira hacia lo alto; el perfil de un hombre anciano, con la barba blanca y la cabeza con calvicie avanzada, como el retrato de Juan de Zumárraga realizado por Miguel Cabrera para representar el milagro; un hombre más joven, con toda probabilidad el intérprete Juan González; un indio de rasgos marcados, con barba y bigote, que abre su propio manto ante el obispo, sin duda Juan Diego; una mujer de rostro oscuro, una sierva negra que estaba al servicio del obispo; un hombre de rasgos españoles que mira pensativo acariciándose la barba con la mano.
La ciencia puede mostrar la realidad indiscutible presente en la Imagen no su origen

En definitiva, en los ojos de la imagen de la Virgen de Guadalupe está impresa una especie de instantánea de lo que sucedió en el momento en que tuvo lugar el milagro.

En el centro de las pupilas, además, a escala mucho más reducida, se puede ver otra «escena», totalmente independiente a la primera. Se trata de una familia indígena compuesta por una mujer, un hombre, y algunos niños. En el ojo derecho, aparecen otras personas de pie detrás de la mujer.

Hasta aquí llega la ciencia, fue la conclusión de Aste Tönsmann. El cómo se ha realizado algo así no es posible descifrarlo con métodos científicos.